ELENA BANGUESES mirando a MARÍA XOSÉ DOMINGUEZ

Las obras, profundamente empáticas, de María Xosé Domínguez, podrían considerarse un medio de canalización del sufrimiento de las mujeres. A través del simbolismo, rituales y homenajes, la artista muestra a los espectadores situaciones en las que otros se encuentran, estas pueden ser íntimas o públicas, solitarias o colectivas.

Independientemente de los diferentes métodos que emplea, María Xosé permanece incondicionalmente fiel a su materia prima, la emoción. Gran parte de su trabajo es una invitación a sentir y conectar.

Sons cor violeta, 2016.| María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

Sons cor violeta, 2016.

En piezas como “Sons cor violeta” y “Muerta mi alma que se muera mi cuerpo”, reclama nuestra atención sobre el homicidio y el sufrimiento masivo de mujeres en acontecimientos, tanto históricos como en el contexto contemporáneo. “Sons cor violeta” hace alusión al incendio de la fábrica Triangle Shirtwaist de Nueva York en 1911, en donde fallecieron 146 personas, de las cuales 123 eran mujeres y niñas. La performance “Muerta mi alma que se muera mi cuerpo”, pretende dar visibilidad al secuestro de 276 escolares por Boko Haram en 2014, más de un centenar de las cuales todavía siguen desaparecidas. Ninguna de estas obras funciona como lamentación sino como reclamo del dolor, para que no se olvide y se sienta como si estuviera sucediendo aquí y ahora, evitando así la pérdida de empatía a causa de la distancia temporal o espacial.

El folclore, la mitología y la tradición se entretejen en la obra de María Xosé como parte de su identidad gallega, pero también como puntos de unión con otras culturas, conexión que inicia a partir de residir largas temporadas en el extranjero, concretamente en Marruecos. Las historias que se transmiten de generación en generación, como la de Yasmina, personaje de “Sueños en el umbral. Memorias de una niña del harén” de Fatima Mernissi, que le pide a su nieta que la recuerde, se convierten en nexos de recuerdos arquetípicos y enseñanzas sobre la identidad en la performance de María Xosé “Instinto Orixinal”.

Instinto Orixinal, 2015. | María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

Instinto Orixinal, 2015.

La tradición gallega se filtra a través del feminismo contemporáneo en “Lavandeira”, y revela que las historias tradicionales también pueden tener el siniestro papel de preservar estereotipos femeninos negativos. Las alhajas, al igual que las historias, también suelen transmitirse de una generación a otra en la familia, la identidad y la memoria se concentran en objetos simbólicos como el tradicional colgante Sapo, del que la artista toma prestados motivos para proyectar en su instalación “Obxecto da memoria”.

Lavandeira, 2017. | María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

Lavandeira, 2017.

Obxecto da memoria, 2017| María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

Obxecto da memoria, 2017

Recientemente, la artista ha estado utilizando su práctica artística como herramienta de encuentro interior, en esta expresión de la emoción más íntima, busca confrontar la mortalidad como una faceta ineludible del ser. La enfermedad y la pérdida de su madre sumieron a la artista en una etapa de aislamiento personal. El amor y el cuidado compartido entre madre e hija son centrales en obras como “Ritual para unha despedida” y “A miña nai: Ti es a miña estrela”, ambas obras funcionan como ejercicios catárticos contra las penurias del amor interno enfrentado a la fragilidad mortal.

Ritual para unha despedida, 2017.| María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

Ritual para unha despedida, 2017.

Sin embargo, las obras en sí mismas no son frágiles, así como tampoco lo es la postura de la artista. María Xosé se alinea decisivamente con las emociones, no en contra, sino más bien junto a ellas con una actitud pragmática. Curiosamente, en ambas piezas elige explorar el mismo tema a través de dos tradiciones distintas que influyen en su obra. En el vídeo “Ritual para unha despedida”, la evolución de la enfermedad de la madre de la artista es descrita a través de motivos marroquíes en henna, dibujados sobre el cuerpo de la artista por su hija. Con gestos que van desde toques suaves hasta frotamientos fuertes, la artista elimina la henna prematuramente, antes de que tenga tiempo de teñir suficientemente su piel.

Por otro lado, en “A miña nai: Ti es a miña estrela”, la artista toma prestadas imágenes de la tradición. La fotografía de su madre el día de su primera comunión, se muestra en tamaño real con el rostro oscurecido por un rectángulo de estaño con un mensaje recortado, dejando que la declaración de amor se proyecte sobre el rostro de la madre. Parece que la artista trata de rescatar a su madre de los roles impuestos por la sociedad y la tradición y enfoca su mensaje hacia la persona que se esconde detrás de todas esas formalidades.

A miña nai: Ti es a miña estrela, 2017.| María Xosé Domínez | Elena Bangueses | Mujeres Mirando Mujeres

A miña nai: Ti es a miña estrela, 2017.

En las obras de María Xosé Domínguez, la emoción se convierte en un medio para la memoria, tanto comunitaria como personal. La artista busca iniciar conexiones empáticas entre el espectador y los sujetos de sus obras, no para diluir el sufrimiento, sino para otorgarle un papel relevante y céntrico en sus piezas.

El efecto de sus obras es catártico, pero las imágenes delicadas y trabajosas permiten que esto suceda sin trauma. El espectador está expuesto y al mismo tiempo protegido por las situaciones en las que se encuentran las protagonistas de su obra. De manera brillante logra transmitirnos las emociones que inundan cada una de sus creaciones.

Elena Bangueses. Web. Bio en MMM
María Xosé Domínguez. Web. Bio en MMM.
Imagen destacada. Muerta mi alma que se muera mi cuerpo, 2017.