Julia Juániz y sus miradas a mujeres
MARÍA MILLÁN mirando a JULIA JUÁNIZ
“Mi proyecto creativo denuncia, entre otro tipo de injusticias, la lucha de las mujeres por conquistar la visibilidad y el reconocimiento que se nos ha denegado en todos los ámbitos de nuestra sociedad”, afirma Julia Juániz con rotundidad.
Juániz, artista multidisciplinar, construye con su obra un relato crítico frente a la injusticia social, la situación política, o el persistente dominio patriarcal. En su trabajo explora con diferentes formatos y herramientas creativas, sirviéndose a menudo de archivos fotográficos, restos de películas de celuloide que pinta a mano, o recortes de revistas. Julia ha creado un lenguaje visual personal donde su postura crítica no está subordinada a sus intereses formales y estéticos.
Dejó sus estudios de medicina para explorar, y finalmente dedicarse profesionalmente al mundo del cine. Julia es montadora de películas y de documentales desde hace más de tres décadas. Cuenta en su haber con más de sesenta títulos en los que ha trabajado con directores como Basilio Martín Patino, Víctor Erice, Carlos Saura, Daniel Calpasoro, entre otros. Julia Juániz ha sido nominada dos veces a los premios Goya por su trabajo en Iberia y Goya en Burdeos, ambas obras dirigidas por Carlos Saura.
La vida de Julia ha estado siempre rodeada de imágenes. Sabe muy bien la importancia que tienen, así como la capacidad de manipular o emitir un mensaje dependiendo del uso que se les de. Al trabajar con las imágenes, tanto como montadora como en sus proyectos personales, a Julia le mueve un mismo sentimiento que responde a una constante preocupación por asegurarse de que el mensaje, o el cuestionamiento que transmiten las piezas, ejercen algún tipo de influencia que haga reflexionar al espectador.
Además de dar clases de Montaje y de Análisis de guiones en escuelas de cine, Juániz dirige y escribe cortometrajes. Una de sus fuertes convicciones es que ella como artista, si puede, con su trabajo va a hacer una llamada de atención allí donde vea abusos. En su búsqueda por la justicia y equidad social, Julia expone video creaciones como El grito de Guernica, un corto de quince minutos que nos habla de los continuos bombardeos físicos y políticos a los que la humanidad está expuesta. Es un lamento por la memoria tan corta que como sociedad tenemos. Como resultado, seguimos perpetuando los mismos actos atroces y, a menudo, mirando de lejos o para otro lado. La obra es un grito que exige la extinción de esas acciones. Igualmente denuncia la injusticia social con su corto El discurso de Chaplin, – proyectado dentro de un combo con imágenes de Charles Chaplin, estampas de guerras, o de diferentes tipos de acoso y objetos hostiles utilizados en nuestra sociedad actual.
En una de sus últimas muestras en el espacio Zapadores de Madrid, hace una llamada de atención a los estamentos políticos y judiciales con la instalación Asalto al Poder, en la que sobre un suelo ajedrezado colgaban de una perchas abrigos negros en representación del poder actual. Éstos estaban rodeados de frases reivindicativas escritas en rojo sobre las paredes y en las columnas de la sala exigiendo, entre otras cosas, justicia, educación y sanidad, a la vez que otras máximas condenaban la corrupción y la desigualdad.
La serie de fotografía Mis miradas a Mujeres, en la que Julia se emplea hace más de una década, es una reflexión sobre el trabajo de mujeres a las que admira. Algunas de ellas son conocidas, otras son parte de su entorno cercano. Todas le han servido de inspiración.
Con los collages fotográficos Julia rinde un homenaje a estas mujeres creando nuevos retratos sobre ellas. Todas compartimos la desigualdad y discriminación histórica que todavía persiste, aunque hayamos mejorado algo. Partiendo de un retrato de archivo, pinta sobre la imagen, añade al contenido elementos que construyen una historia, fotografía el collage, y digitalmente le da el acabado final. Así, Juániz nos deja entrever quiénes son estas mujeres, y qué estímulos le provoca el haberlas encontrado. A su vez, deja que la persona espectadora conecte con la imagen y se deje llevar por las conexiones emocionales o intelectuales que la obra le suscite.
Julia afirma que su trabajo personal dio un importante giro al conocer el mundo de Hilma af Klint hace más de una década. Af Klint fue ignorada por críticos, historiadores y artistas de su época, pero esto no impidió que ella siguiera desarrollando su carrera artística. Trabajó a contracorriente de las tendencias del momento, siendo hoy considerada como una de las primeras artistas abstractas de la historia, posiblemente antecesora de Kandinsky, quien es todavía aclamado como el padre de la pintura abstracta.
El conjunto de retratos de Mis Miradas a Mujeres es para Julia un proyecto en curso con propuestas y preguntas abiertas. Sigue encontrando mujeres que le inspiran en su rutina diaria como ciudadana y miembro de las Artes y las Ciencias Cinematográficas de España, así como de la Academia de Cine Europeo. Su compromiso como persona que cree en el poder que tiene el arte para que se produzcan cambios no tiene límite.
“Cuando nos vamos, la obra queda y otras personas continuarán” y Juániz añade “cuando presento un proyecto siempre escribo: SIN FIN. ¡Queda mucho por hacer!”
Julia Juániz, mujer observadora, transgresora, generosa, incansable y libre.
María Millán. Web. Bio MMM.
Julia Juániz. Web. Bio MMM.