Chie Lily: Mi trabajo interpreta la sociedad actual desde la perspectiva de la psicología humana
MIRIAM CALLEJO mirando a CHIE LILY
A pesar de su juventud, la intención de Chie Lily es muy clara: conocer el mundo y sus gentes para poder abrir las fronteras del Arte y de su conocimiento personal. Esto no sería muy llamativo si no proviniera de Japón, de uno de los países que más miran hacia y desde sí mismos, sobre todo en cuanto a su cultura y costumbres, pero que a su vez vive en una enorme contradicción desde ya hace siglos, asumiendo la cultura de masas estadounidense casi como propia. Chie mira al mundo desde su totalidad y su diversidad, haciendo suyo todo lo que aprende de su contacto con sus habitantes y, en la medida de lo posible, tratar de mimetizarse con ese nuevo contexto que le proporciona el lugar donde viaja y trabaja.
Bueno, Chie, lo primero de todo, ¿podrías presentarte a los lectores españoles?
Nací en Japón en 1992 y ahora vivo y trabajo en Alemania. Mi interés por el arte comenzó a los tres años y hace casi tres años que me gradué en Bellas Artes en la especialidad de pintura al óleo en la Universidad de Tokai. En cuanto a mis técnicas preferidas, empleo pintura al óleo y acrílica y, recientemente, mi trabajo se ha expandido a la fotografía y el collage.
Ahora, que te conocemos mejor, qué podrías decirnos sobre tu concepto de Arte.
Mi trabajo interpreta la sociedad actual desde la perspectiva de la psicología humana y las actividades en el sentido de la comprensión del comportamiento humano. También estoy interesada en el intercambio cultural que se produce a través del arte contemporáneo y, por otra parte, me gustaría seguir participando en programas de residencias de artistas.
¿Qué diferencias encuentras al trabajar en pintura y collage?
Hasta ahora, he estado creando con óleos y acrílico, pero desde 2015 he trabajado también en estas técnicas. Para mí no hay restricciones al utilizar cualquier técnica en mi trabajo. Por ejemplo, en la serie Déjà vu empleo varias de estas técnicas. También utilizo mucho la pintura acrílica transparente como si fuera pegamento y dibujo sobre fotografía. Además, uso pigmentos tradicionales japoneses en mis pinturas. Antes de hacer Déjà vu 1 y Déjà vu 2, imprimía las fotos al mismo tamaño que la imagen del trabajo final de 21×29,7 cm, pero finalmente decidí cortar las fotografías y luego pinté una fina capa de acrílico sobre ello. Lo que quería era añadir dibujo a la fotografía inorgánica para expresar la calidez de la memoria del ser humano y la sensación de sentir el aire de la tierra.ç
¿Tu concepto de la sociedad actual es global o crees que se acota a un país o región?
Pienso en la persona como individuo de modo global y conocerlo a nivel psicológico, intento tener conversaciones con la gente de los lugares a los que viajo para entender sus ideas y costumbres. Creo que es necesario intercambiar opiniones sobre problemas políticos, sociales y religiosos, familiarizarse con los habitantes del lugar, compartir experiencias y mimetizarse, para así comprender mejor los comportamientos y pensamientos humanos.
Has vivido en varios países occidentales a través de residencias artísticas y programas, ¿cómo se ve influenciado tu trabajo en estas estancias?
Creo que en mi caso es algo que definitivamente ayuda mucho a mi trabajo. Para mí, ser artista residente es la mejor oportunidad para visitar diversos países y reflexionar sobre la Humanidad. Tienen fuertes efectos en los conceptos de mis pensamientos, que son los que uso para crear mis trabajos. Por ejemplo, tener una conversación con la población local, el movimiento de la ciudad y sus historias me afectan mucho y son experiencias muy impresionantes. Yo diversifico la palabra “humano” en mi mente, por lo que trato de no preocuparme mucho por en qué tipo de país ha nacido o se ha criado una persona.
Mi estancia perfecta en el extranjero es vivir la misma vida que la gente del lugar donde esté. Quiero adquirir la mayor información en el menor periodo de tiempo, y luego esa información es lo que me ayudará a reflexionar sobre la humanidad.
Puesto que se estudia Nihonga y otras artes tradicionales en la universidad japonesa, ¿cómo ha influido la Historia del Arte Japonés en tu trabajo?
Aprendí el estilo occidental de la pintura desde que era pequeña y también he estado centrada en ello. Sin embargo, mis trabajos siguen teniendo una influencia del nihonga, como el reconocimiento espacial o el efecto tridimensional y el uso de del color en mis pinturas.
Dentro de las técnicas del Nihonga, el Bokashi y el Tarashikomi son mi modo favorito de expresar el momento del estado de ánimo y la atmósfera. Para que se entienda un poco mejor, el Tarashikomi es una técnica en la que se aplica una segunda capa de pintura antes de que se seque completamente la anterior y el resultado es una especie de dripping muy dinámico; el Bokashi se usaba sobre todo en grabado y era el modo de dar una transición de color para hacer sensación de profundidad.
¿Cómo ves en estos momentos el panorama actual del arte japonés?
En Japón hay muchos grupos y organizaciones de arte. Los artistas normalmente pertenecen a un grupo de arte en particular. Además, ocurre que gente diversa toman parte de artistas famosos ya que suelen aparecer en televisión para aquellos que son artistas amateur.
Por otro lado, cada grupo tiene sus propias características, por ejemplo, en un grupo de pintores, hay organizaciones que prefieren orientarse al impresionismo y otras al realismo. Personalmente creo que esta escena artística está ocasionando en general un retraso en la calidad del arte contemporáneo japonés. Actualmente en Japón, un número de artistas de arte contemporáneo han comenzado a movilizarse en contra de este tipo de grupos artísticos para dar una mayor movilidad y libertad.
¿Qué piensas del papel de la mujer en el arte actual japonés? ¿Has notado alguna diferencia respecto a lo que ocurre en Occidente?
Sobre las mujeres artistas actuales de mi país, las artistas que más están siendo apreciadas por el público últimamente son mayormente mujeres que en un momento fueron actrices o modelos. Es una triste realidad porque así es casi imposible que la esencia de un trabajo esté evaluado por su propio mérito y no por la fama que ya llevan detrás.
También ocurre que el arte contemporáneo no se considera aceptado en la escena artística si no ha sido evaluado y aceptado en el extranjero, sobre todo en Occidente, porque es la referencia. No hay un ambiente para hacer crecer y desarrollarse tanto a los jóvenes como a los artistas ya adultos en Japón. Por eso, muchas artistas jóvenes, tendemos a adquirir esa experiencia fuera de nuestro país. Espero que la situación vaya cambiando poco a poco.
En cuanto a la globalización de la información, ¿piensas que el movimiento “Me Too” ha llegado también a Asia o es solo un movimiento Occidental?
Japón es muy conservador. Los casos del Me Too en Estados Unidos y Reino Unido sí que son reflejados por los medios de comunicación, pero para mí fue muy impresionante que la reacción del público general fuera, por decir mucho, tímida. La autonomía económica y espiritual de la mujer japonesa es extremadamente baja respecto a los países desarrollados europeos. Aunque sí que se ha visto un pequeño cambio, la noción de que el marido trabaje y la mujer haga las tareas del hogar sigue siendo muy común. En una sociedad como esa creo que la mujer no puede tener una voz propia.
Como mujer asiática que ha vivido y trabajado en diversos países occidentales, ¿qué diferencias encuentras? ¿cómo lo sientes como mujer y artista?
Quien vive en Europa y América cree que hay diferencias en cuanto a pensamiento. Asia aún está por detrás de Europa y los Estados Unidos. Por otro lado, también creo que hay varios tipos de mujeres, pero muchas mujeres extranjeras desean acumular nuevos conocimientos y experiencias en otros países.
¿Crees que el arte y la cultura son un camino para conseguir derechos para las mujeres a nivel global?
Creo que el arte y las actividades culturales pueden empoderar a las mujeres cuando se compara con otros campos. En el mundo del arte, espero que las mujeres puedan estar activas sin discriminaciones. el arte es un modo de expresar opiniones y pensamientos a través de nuestros trabajos, no como una lucha o una guerra, esto hace posible comunicar de una forma inteligente. Sin embargo, incluso ahora, los hombres son los dominantes en el arte contemporáneo y lideran el mundo y son más consumados. para que las mujeres sean y estén activas en el mundo del arte y poder
© Chie Lily. Web. Bio en MMM
Miriam Callejo.Web Bio en MMM
Imagen destacada: A Man. 2015. Papel, óleo, tinta en marco de madera. 34x38cm