3 artistas multidisciplinares y 3 precursoras en «Tal día como hoy» de Diana Larrea

Tres pintoras PRECURSORAS del arte del siglo XX que trabajaron en la sombra sin ningún reconocimiento: una sueca inventora de la abstracción, una alemana iniciadora del expresionismo, y una italiana postmoderna multidisciplinar.

Tal día como hoy, el 21 de octubre de 1944, murió en un accidente de aviación a los 81 años la pionera artista sueca Hilma af Klint. Hoy en día está considerada la iniciadora del arte abstracto, anticipándose varios años a Kandinsky, Mondrian o Malévich. Todo el conjunto de su legado permaneció oculto en un almacén durante más de cuatro décadas, hasta que en el año 1986 el LACMA (Los Angeles County Museum of Art) descubrió por primera vez al público en una exposición parte de su obra.

Installation view Hilma af Klint – «A Pioneer of Abstraction», 2013 Foto- Åsa Lundén/ Moderna Museet, Stockholm.

Nació cerca de Estocolmo en 1862 y fue criada en una familia acomodada. Perteneció a una de las primeras generaciones de mujeres europeas que pudo formarse académicamente en arte, ya que la Real Academia de Bellas Artes de Estocolmo era una de las pocas instituciones que admitía a estudiantes femeninas.

Cuando tenía 18 años, un hecho trágico en su vida personal, la muerte de su hermana pequeña, hizo que se interesara por las prácticas espiritistas y ocultistas, experimentos que fueron fundamentales en su concepción artística. A partir de entonces, formó junto a otras 4 amigas un grupo llamado “Las Cinco”, que se reunían en secreto para practicar la escritura y el dibujo automáticos durante sesiones de espiritismo, siendo precursoras de las técnicas surrealistas.

Hilma af Klint,»Grupp III, nr 5. De storafigurmålningarna, Nyckeln tillhittillsvarande arbete», 1907. Olja på duk150 × 118 cm. HAK042© Stiftelsen Hilma af Klints Verk

Sus primeros cuadros abstractos datan de 1906, cuando comenzó su emblemática serie “Cuadros para el templo”, compuesta por 193 obras que realizó durante 9 años y que se entiende como una metáfora de la evolución espiritual. Este trabajo recibe influencias de la teosofía y la antroposofía, abordando temáticas metafísicas como la dualidad del yin-yan o el origen del cosmos. Formalmente son cuadros de grandes dimensiones, en los que representó figuras geométricas recurrentes, como círculos concéntricos de colores planos y símbolos arquetípicos como la espiral, la pirámide o diagramas con estructura de mandala. Hilma realizó más de 1.200 obras, tanto lienzos como dibujos, pero sus cuadros abstractos nunca fueron expuestos durante su vida. Consciente de su talento visionario, en su testamento dejó escrito que estas obras no salieran a luz hasta 20 años después de su muerte.

Hilma af Klint at her studio at Hamngatan 5, Stockholm, c.1895. Courtesy of Stiftelsen Hilma af Klints Verk.

Tal día como hoy, el 21 de noviembre de 1907, falleció a los 31 años a causa de una embolia postparto, la precursora pintora expresionista alemana Paula Modersohn-Becker. Fue una artista extremadamente prolífica y con un desbordante talento. Sin embargo, no consiguió ningún reconocimiento durante su vida.

A lo largo de una carrera de poco más de 10 años llegó a realizar casi 1.000 dibujos y 750 cuadros, de los cuales sólo llegó a vender dos, uno de ellos a su amigo íntimo, el poeta Rainer Maria Rilke (1875-1926). Su obra destaca por su particular intensidad y su innovadora capacidad para construir un lenguaje visual propio, en el que sintetizó varios movimientos postimpresionistas como el expresionismo, el cubismo o el fauvismo. Está reconocida como la primera mujer artista en representar autorretratos desnudos, destacando uno de ellos en el que se encuentra embarazada de 4 meses. Nació en Dresde en 1876 en el seno de una familia privilegiada.

Paula Modersohn-Becker, «Selbstbildnis am 6. Hochzeitstag» (Self-Portrait on the Sixth Wedding Day), 1907. Paula Modersohn-Becker Museum – Museen Böttcherstraße (Germany – Bremen)

Con 20 años descubrió la colonia de artistas fundada en 1889 en la pequeña localidad de Worpswede, cerca de Bremen (Baja Sajonia). Paula Becker quedó fascinada con la filosofía de este grupo artístico anti-academicista, que buscaba una conexión más íntima y primitiva con el paisaje natural, así como con la vida sencilla de la población rural. En el año 1900 viajó por primera vez a París para continuar allí su formación y en los años siguientes realizó varias estancias en esta ciudad, donde se nutrió de la vitalidad artística parisina.

Paula Modersohn-Becker, «cabeza de chica». fecha desconocida. Colección privada.

La mayor parte de su legado se conserva en Paula Modersohn-Becker Museum en Bremen (Museen Böttcherstraße), aunque también se encuentra en las colecciones del Museum Kunstpalast de Düsseldorf, la Neue Pinakothek de Munich (Bayerische Staatsgemäldesammlungen), la Kunsthalle de Bremen, el Niedersächsisches Landesmuseum de Hanover, el Von Der Heydt Museum en Wuppertal, el Museum Ostwall en Dortmund, el Arp Museum Bahnhof Rolandseck en Rolandseck, el Gemeentemuseum Den Haag de La Haya, el Musée d’art Moderne de la Ville de Paris o el Detroit Institute of the Arts.

Tal día como hoy, el 25 de septiembre de 2015, murió en Turín a los 97 años de edad la destacada e imprescindible artista italiana Carol Rama. Recientemente ha sido elogiada como una de las figuras más sobresalientes de los movimientos de vanguardia de principios del siglo XX, aunque la trascendencia de su trabajo no fue reivindicada hasta finales de los años 90.

Carol Rama, “Nonna Carolina”, 1936. Archivio Carol Rama, Turin; Collection Fondazione CRT per l’Arte Moderna e Contemporanea and GAM Galleria Civica d’Arte Moderna e Contemporanea, Turin; courtesy Fondazione Torino Musei

Nació en Turín en 1918 y, a lo largo de sus 70 años de prolífica carrera, su trabajo ocupó un lugar marginal alejado del discurso hegemónico. Uno de los aspectos más subversivos de su obra se encuentra en la representación sexual del cuerpo femenino, que aparece siempre amputado, lastimado, aunque aún resistente ante las fuerzas que intentan oprimirlo y dominarlo. Estos ejercicios plásticos eróticamente poco ortodoxos, le negaron el reconocimiento artístico entre los círculos de críticos e intelectuales de su época. Sin embargo, hoy en día sus innovadores trabajos se reconocen como precursores del universo creativo de muchas artistas posteriores, como Cindy Sherman, Kiki Smith o Tracey Emin.

Carol Rama, «The Cabinet of Carol Rama», 2010. Exhibition at The Liverpool Biennial.

En la 50ª Bienal de Venecia del año 2003 recibió el León de Oro por toda su trayectoria y, al año siguiente, la Fondazione Sandretto Re Rebaudengo de su ciudad natal presentó una gran exposición antológica. En 2014 el MACBA de Barcelona le dedicó una extensa retrospectiva, comisariada por Teresa Grandas y Paul B. Preciado, que después viajó al Musée d’Art Moderne de la Ville de Paris, el Irish Museum of Modern Art (IMMA) de Dublín o el Espoo Museum of Modern Art (EMMA) de Helsinki. Este mismo año 2017, el New Museum of Contemporary Art de NYC celebró otra gran exposición con más de cien piezas. En los últimos años, los precios sus obras en las subastas han incrementado su valor vertiginosamente, llegando a alcanzar algunas piezas en Christie’s los 300.000 €. 

Por desgracia, Carol Rama no llegó a ser plenamente consciente de este tardío y merecido reconocimiento internacional, ya que durante la última década de su vida estuvo muy enferma.

Carol Rama en su casa-estudio en Turín, 1997. Photo by Pino Dell Aquila

Tres artistas MULTIDISCIPLINARES europeas nacidas a finales del siglo XIX: una dadaísta polaca inventora del ready-made, una alemana pionera del collage fotográfico y una británica experimentadora del collage con “objets trouvés”.

Tal día como hoy, el 12 de julio de 1874, nació en Świnoujście, actual Polonia, la artista dadaísta alemana Elsa von Freytag-Loringhoven (de soltera Plötz). Durante la mayor parte de su vida trabajó y vivió en Nueva York, donde desarrolló su pintura, sus esculturas vanguardistas, sus performances callejeras y su poesía fonética.

Elsa Von Freytag, «Dada Portrait of Berenice Abbott», c. 1922-26. MOMA, NY.

En Greenwich Village fue donde conoció a algunos de sus amigos íntimos, con quienes también trabajó intensamente, como Djuna Barnes, Man Ray y Marcel Duchamp. Para ella, el arte y la vida eran inseparables. Supo proyectar su espíritu excéntrico, transgresor y anárquico a todas su creaciones, desde los ensamblajes artísticos que componía con objetos encontrados en la basura, siendo precursora del ready-made, hasta las actuaciones que orquestaba en la vía pública o los vestuarios que diseñaba con desechos.

1. Elsa Von Freytag posando para una fotografía de Man Ray 2. Elsa Von Freytag, «Retrato de Marcel Duchamp»,1919. Redescubierto por el Museo Whitney de Nueva York en 1996.

A pesar de ser pionera en tantos campos, su trabajo entonces no obtuvo ningún reconocimiento y hoy en día apenas se conservan obras suyas. Sin embargo, las investigaciones recientes sobre la correspondencia postal de la época, indican que algunas obras de otros artistas del momento pertenecen en realidad a Elsa von Freytag. Un ejemplo claro es el actual descubrimiento de su autoría en la concepción de la famosa obra de Duchamp “Fuente” (1917), que cambió para siempre la historia del arte.

Elsa se suicidó en su apartamento de París en 1927 a la edad de 53 años.

Tal día como hoy, el 1 de noviembre de 1889, nació en Gotha (Alemania) la artista dadaísta Hannah Höch. Está considerada la pionera de la técnica del fotomontaje y sus obras han ejercido una influencia decisiva en la cultura contemporánea.
Inventó la técnica del fotomontaje inspirándose en los collages pictóricos cubistas. En sus composiciones se apropiaba tanto de imágenes de revistas como de textos o palabras que extraía de la publicidad, con el objeto de lanzar metáforas incisivas sobre temas políticos y feministas.

1. Hannah Hoch, «hecha para una fiesta ( hecha para una fiesta )», 1936. Collection of Ifa, Stuttgart. 2. Hannah Höch, «Ohne Titel (Aus einem ethnographischen Museum)» (Untitled [From an Ethnographic Museum]), 1930 Museum für Kunst und Gewerbe, Hamburg. Photo- courtesy of Maria Thrun

Hannah Höch, «Indian Dancer- From an Ethnographic Museum», 1930. MOMA, NY.

Con la llegada de los nazis al poder fue calificada de artista subversiva, por lo que tuvo que seguir viviendo y trabajando en la clandestinidad. Murió en Berlín en 1978. Sus obras conservan en el MOMA y el MET de NY, el National Museum of Women in the Arts en Washington DC, la Berlinische Galerie Museum of Modern Art en Berlín, o la Nationalgalerie Staatliche Museen zu Berlin.

Hannah Höch, «Self-Portrait in her studio», ca 1930

Tal día como hoy, el 1 de diciembre de 1899, nació en Buenos Aires la pintora, escultora y fotógrafa británica Eileen Agar. Fue hija de un empresario escocés y de madre norteamericana. En 1911 su familia regresó a Londres, donde pudo formarse en la Byam Shaw School of Art y en la Slade School of Fine Art, graduándose allí en el año 1925. Tras esta etapa viajó a París, donde tomó contacto con algunos miembros del grupo surrealista, como André Breton y Paul Éluard, quien se convirtió en uno de sus íntimos amigos.

Eileen Agar, «Fish circus», 1939. National Galleries of Scotland.

Desde el año 1934 formó parte del “London Group”, una sociedad de artistas creada al margen de la Royal Academy para favorecer nuevas oportunidades de exposición a los artistas visuales. Fue en esta época cuando Eileen Agar comenzó a experimentar con nuevos materiales, como el collage de objetos y el “objet trouvé”.

Eileen Agar, «Human skull painted gold and decorated with small sea shells» [1921–4]. Tate, London.

Durante la década de los años 30 y 40, participó en numerosas exposiciones surrealistas en Londres, París, Ámsterdam, Nueva York y Tokio. Su aproximación al movimiento surrealista es muy personal, siendo recurrente en su obra los símbolos marinos, como conchas, peces, estrellas de mar y barcas; tal vez como metáforas de la conexión creativa con el inconsciente o como alusión a la inspiración artística. En 1990 fue elegida miembro de la Royal Academy y al año siguiente murió en Londres con 91 años. Gran parte de sus obras se conservan en la Tate londinense.

Diana Larrea. Aquí encontrarás todo su proyecto